El afilado cono de la nariz se puede ver aquí en la posición elevada, usada para aparcamiento y velocidad de crucero.

La posición hacia abajo del cono de la nariz solía usarse para rodaje, aterrizaje y despegue.

Las sondas de datos estaban instaladas a ambos lados de la parte delantera.

El tren delantero y las luces de aterrizaje instaladas en él son visibles aquí.

El tren de aterrizaje delantero se retraía hacia atrás y su brazo central tenía un carenado que encajaba en el eje central de la panza.

El tren de aterrizaje principal se retraía hacia adelante y tenía seis ruedas a cada lado, esto era debido al pequeño espacio en la bodega y porque las ruedas pequeñas permitían que el avión operara en pistas sin pavimentar.

Ese cono debajo de la cola albergaba el paracaídas para detener el avión después del aterrizaje, ya que el Tu-144 nunca estuvo equipado con inversores de empuje.

La cola del Tu-144, o estabilizador vertical, tenía 6,50 m de altura y dos timones.

Un primer plano de las Unidades de Control de Vuelo Motorizadas (PFCU) del timón superior. Como el timón era tan delgado, las PFCU no se podían instalar internamente como en otras aeronaves.

Esas pequeñas antenas en el borde de la cola son descargadores estáticos.

Otros PFCU, esta vez los que controlan el elevón exterior de babor.

Se pueden ver más descargadores estáticos en la punta alar.

Las tomas del motor tenían rampas variables y solapas de derivación con posiciones controladas automáticamente para adaptarse al flujo de aire del motor. Los diseñadores de Tupolev creían que tenían que ser muy largas para ayudar a prevenir vibraciones y para atenuar la distorsión de entrada.

Una vista cercana de tres de los cuatro elevones del ala izquierda y las cuatro toberas de los motores.

Una de las características principales del prototipo era que los cuatro motores estaban montados uno al lado del otro.

El prototipo nunca estuvo equipado con inversores de empuje, por lo que necesita paracaídas para detenerse después del aterrizaje.

Cabina del piloto del Tu-144 prototipo. Como los aviones de la era analógica, tenía demasiados relojes y luces y el color turquesa típico de los aviones soviéticos.

La cabina trasera del prototipo tenía una configuración 3 + 2, excepto en las últimas 5 filas, cerca de los baños, donde el fuselaje era más estrecho.